Sammy Baloji.

La propuesta expositiva de la que podemos disfrutar en Casa África durante este verano y hasta el próximo 10 de octubre, nos propone un recorrido por una selección de obras de autores participantes en los encuentros de fotografía de Bamako.
En ella descubrimos a Sammy Baloji, nacido en Lubumbashy, República Democrática del Congo en 1978. Sus montajes fotográficos de gran formato nos trasladan a un universo colonial donde se entremezclan las imágenes del pasado con las herencias del presente. Los restos de arquitectura minera heredada del periodo colonial, se funden con imágenes de los antiguos mineros explotados por los colonizadores. Baloji nos invita a reflexionar sobre el concepto de explotación que el colonialismo ejerce y ha ejercido sobre una sociedad marcada por este hecho y las estructuras de poder.
Con una técnica poco refinada pero de gran potencia expresiva, las imágenes de Baloji reclaman nuestra atención trasladándonos un mensaje anacrónico en el continente africano, donde los procesos de explotación se trasladan de unas sociedades a otras impunemente. Con lecturas transversales podemos lanzar líneas de fuga que nos hablan del colonialismo empresarial como modo de explotación globalizado.

Geert van Kesteren

El próximo 17 de Septiembre en la sala polivalente del CAAM, en Las Palmas de Gran Canaria, tendremos la posibilidad de escuchar, conversar y aprender con Geert van Kesteren. Van Kesteren es reportero gráfico en Irak desde la ocupación y es uno de los pocos reporteros que aún continúan con su trabajo en el pais.
Recomiendo visitar Why Mister, Why? donde se recoge parte del trabajo realizado en Iraq
A continuación transcribo la nota de prensa que me envian desde el CAAM:

CRISTINA GRACÍA RODERO. LA MAESTRA ENTRA EN MAGNUM

Leo en distintos medios que la extraordinaria fotógrafa española Cristina García Rodero ha sido admitida en la agencia MAGNUM. La entrega incondicional al oficio caracteriza a García Rodero, que ha dedicado su vida a documentar ritos religiosos y paganos, tanto en España como en otros países del mundo.
El reconocimiento de muchos profesionales españoles en este tipo de círculos es escaso, un ejemplo es el de la propia agencia donde, con el ingreso de Cristina se produce la primera incorporación de un español a dicho organismo. Ya podemos ver sus fotografías en la pagina de la agencia.
Desde este pequeño rincón me gustaría lanzar mi mas sincera felicitación, las imágenes de Cristina García Rodero siempre me han causado una emoción intensa, penetrante, espiritual, con un grado de incomodidad ante los ritos presentados que me causan un interés instantáneo.

Mona Kuhn. Oliendo a placer

Las fotografías de Mona Kuhn huelen.
Huelen a…. sexo; a placer, a sutileza extrema; a luz tenue que se cuela entre los árboles; a fina brisa que roza la piel desnuda una tarde calurosa de verano; huelen a pasión, a debilidad, a fácil deterioro, a excitación…
…huelen a deseo.
El erotismo en los trabajos de Khun es extremo: los protagonistas resisten cualquier mirada, están desvestidos, no desnudos. Las escenas son misteriosas, llenas de gestos intencionados, veladas, desenfocadas, y todo ello controlado por la mirada de una fotógrafo que es capaz de moderar en todo momento el poder sexual que desprenden estas imágenes.

ANDREW LACON.

Obtener un espacio de carácter intimista e introspectivo, donde la ausencia de figuras antropomórficas implica que el espectador se erige como auténtico personaje. Lo único que sigue vivo en la imagen es la naturaleza con sus garras invisibles, ella es quien se ha resistido a perecer del todo, ganando la partida final después de la primera derrota.
Andrew Lacon juega con este tipo de imágenes, donde la fascinación de la intervención humana sobre el paisaje, le lleva a generar un conjunto de piezas documentalistas que reflejan la situación social, política y económica contemporánea.

JEFF BARK. INTROSPECCIONES PICTORIALISTAS.

Lo bello parece anacrónico, de otra época, antiguo. La belleza requiere tiempo, empanarnos delante de la imagen, contemplar lo insignificante, descubrir el olor putrefacto del tiempo, el símbolo como significado encríptado, como refuerzo de un discurso enclaustrado en el pasado, reivindicando antiguas victorias, escenificando nuevas encrucijadas.
Sentir el frío que nos traslada una piel lánguida, blanquecina, virginal, a punto de exhalar el último aliento de vida. Ser acariciados por una luz difuminada, suave, sedosa, fina, delicada, sutil. Ruborizar con la desnudez de lo usual, creando espacios de introspección, de abandono autónomo.
Jeff Bark nos propone un romanticismo oscuro, teatral. Un recorrido introspectivo por imágenes renacentistas, tratadas como naturalezas muertas, donde la interrelación entre sexualidad, vulnerabilidad e indiferencia tratadas con destellos de ironía, nos trasladan a una mentira escenificada de momentos viscerales del ser humano.

HELLEN VAN MEENE. INOCENTES DE SU PROPIA TRAGEDIA

El universo gráfico que nos propone Hellen Van Meene, transcurre por las sendas de las miradas perdidas. Esas miradas atrapadas en el infinito, en el shock post-traumático, en una realidad paralela que suele ser indescifrable y ambigua para el resto de los videntes, que intentamos con nuestros ojos, llegar a ese rincón esquivo donde estos personajes se concentran. Es en ese lugar donde la tragedia, los deseos, las ilusiones y las derrotas se entremezclan, se confunden, pierden profundidad de campo y tan solo el silencio y el tiempo, es capaz de recolocarlos en su lugar.
Los inocentes de su propia tragedia presentes en estas fotografías, están a punto de emprender un viaje desdichado, sin retorno. Un periplo en el que la soledad, la teatralidad y los roles adquiridos, los llevan a convertirse en adultos, pasar ese estado traumático que es la adolescencia y abandonar para siempre el tiempo de la inocencia. Una infortunio anunciado a través de una luz fría y desapasionada, donde los modelos son petrificados en poses antiguas y renacentistas, y donde sus miradas perdidas se cristalizan en un gélido instante infinito.